Un ejemplo de superación: Manuelito, un paquetero con síndrome de Down, inspira con su perseverancia

“Un trébol de buena suerte”, así lo describen sus compañeros; conoce a Manuelito, un mazatleco con síndrome de Down que se distingue por sus ganas de trabajar

Noticias
Compartir
  •   Copiar enlace

Dicen que el verdadero valor no es la ausencia del miedo, sino la capacidad de enfrentarlo. Y ese, es el día a día de José Manuel Hernández López, conocido como “Manuelito”, un mazatleco de 38 años con síndrome de Down que desde hace cinco años ha trabajado en una cremería local de la avenida Santa Rosa.

En ese lugar, Manuelito ha demostrado que las adversidades no son un impedimento para alcanzar sus objetivos.

“Él había terminado sus estudios en un CAM, trabajaba en un hotel, pero le gustaba venir para acá y conversar con la gente, entonces él me pidió la oportunidad y se la dimos”, contó Marco Antonio, gerente de la cremería donde trabaja Manuelito.

Manuelito, paquetero con síndrome de down en Mazatlán
Daniel Silva | FIA

Su tarea principal es empaquetar productos para los clientes. Sin embargo, su perseverancia lo llevó a convertirse en un empleado valioso.

Con el tiempo, ha aprendido a realizar diversas tareas en el negocio, ganándose el respeto y cariño tanto de sus compañeros como de los clientes.

“Él solito se acomide con nosotros. Nosotros nunca lo estamos limitando a nada. Si ve a alguien que trae una jaba le ayuda, si ve a una señora que trae una cartera de huevo le ayuda a subirla (...) Él es una parte muy importante para nosotros. Es un trébol de buena suerte para nosotros, dijo Marco Antonio.

Manuelito, paquetero con síndrome de down en Mazatlán
Daniel Silva | FIA

Manuelito: “Embolsar… ayudar con el mandado”.
– ¿Para qué estás ahorrando?
Manuelito: “Un carro”.
Marco Antonio: “Que quiere comprar un carro, dice”.
– ¿Tienes novia?
Manuelito: “Una”.
Marco Antonio: “Ya está casado, le dio anillo y todo”.

Manuelito, paquetero con síndrome de down en Mazatlán
Daniel Silva | FIA

Manuelito sigue trabajando con una sonrisa en el rostro, demostrando que nada es imposible si se tiene la voluntad de luchar por lo que uno quiere. Su ejemplo continúa inspirando a otros, reafirmando la importancia del respeto hacia todas las personas.

“Vengan aquí, para embolsar”, dijo Manuelito. “Que vengan y él les va a embolsar”, agregó Marco Antonio.

Liliana, una mujer mazatleca que transforma desechos en arte: conoce su historia

[VIDEO] A través del arte logra darles vida a piezas a hechas con madera; esta su pasión

Contenido relacionado
×
×